domingo, 13 de abril de 2008

Solo para mí...



No hay cabida en mí para lo permanente, para lo duradero.
No soy persona de un solo lugar, para una sola cosa. Corro de aquí para allá, brincando de un lugar al otro porque me es difícil estar acostumbrada a una sola cosa.
Brinco y brincaré de aquí hasta donde alcance, no hasta donde pueda, no, sino hasta donde me sea posible. Siempre encontrando algo novedoso que no me obligue o me necesite para estancarme ahí, por más que yo lo desee siempre me opongo.
Mi cuerpo se contrae ante esta situación, mi cabeza da vueltas en círculos como resultado de lo diferente.
Mi cerebro manda señales de bienestar.
Mi corazón solo se toma el papel de lo que es y no correcto para convertirme en una persona dogmática para poder caer en su juego y así después abrazarme al mismo tiempo que me consuela por lo mal que hace sentir al respecto.
Pero aún así sigo mi instinto y mis deseos se apoderaron de mi una vez mas y llego a la conclusión de que no soy de un solo lugar, no soy de un solo ambiente. Soy anti-dogma. Al menos eso intento.
Soy yo, y de aquí y soy de allá. Soy tuya pero también mía. Soy primero yo!
Satisfago mis deseos primero, no los tuyos…

Efímeros minutos...

Libre de horario.
Cómo ser separado del tiempo?
Sería fácil decir que es tan sencillo como no usar reloj, pero nos han impuesto la costumbre de querer en todo momento saber la hora que es. Si miramos al cielo decimos, Han de ser como las seis de la tarde, está casi obscureciendo. Pero porque no decir solo, es de día y casi anochece. Ser libres de tiempo es vivir más. Vivir sin horario es dormir profundamente y soñar que vives. Vivir soñando es tan real dado que haces lo posible por convertir ese sueño en realidad. Pero no es posible llevar una vida de sueño. Una vida así es tan falsa como la televisión. Nos criaron para fantasear, para decepcionarnos de nosotros. Soñar en vida es pensar en futuro, piensa en el ahora, en el momento, no en cinco horas o en mañana o dos años. Si, ten un plan, un bosquejo de cómo quisieras tu vivir, pero para que tener un presente desgastante si vives hoy, mañana quien sabe. Muere soñando. Consúmete con la desdicha del presente queriendo vivir un futuro.
Primero es hoy.
Segundo es al rato.
Tercero es en la noche.
Cuarto es por la mañana.
Quinto es en dos días.
No hay un en diez años.
No existen los años.
Ni el ayer.
Vivo ahorita!!...
Mañana no lo sé, tu si?...


Comienzo... I

Hiutonal ha decidido ingerir todo aquello que la pone inconsciente, aún sabiéndolo lo hace, pero Cómo luchar en contra de aquello que la ha mantenido de pié en este largo periodo?. Al ritmo de las ondas musicales su cuerpo danza como si no hubiera bailado nunca, se torna inevitable imitar aquellos movimientos observados en la caja idiota. Ella hace tributo a su nombre y resalta entre tanta gente siendo una Luz preciosa... su cuerpo y alma se unen para elevarse poco a poco y lentamente hacia el centro de la pista arriba de todos los demás. Como nube se mantuvo durante la noche. Resaltaba de entre todos, se sentía tan bien que no sabía ni porque, pero sentía que todo marchaba a la perfección. Era tanto su bienestar que no sabia como manejarlo, jamás se había sentido tan bien emocionalmente y físicamente también. La música y el ambiente daban vueltas a su alrededor, flotando aquella noche es como vi que sus ojos irradiaban tanta paz.
Se encontró con Yaotl quien subió a irradiar junto con ella. Desde abajo podía observar como era tanta la fuerza de esa luz que emanaba tanta paz, que me fue inevitable unirme a su danza pacifica que nos guió a encontrarnos con nosotros, con nuestro yo interno que se encuentra perdido. Después de un buen rato Hiutonal y yo caímos en cuenta de que nos habíamos convertido en una. Fue como si se complementara todo aquello que perdí hace tiempo, fue tanta mi tranquilidad que le pedí que no se fuera, nos mantuvimos como una…
No podemos parar de bailar al ritmo de las ondas musicales y vamos flotando de aquí para allá, volamos hacia donde queramos, siempre como una…



jueves, 3 de abril de 2008

Reforma... abrimos el telón para: TEMPORADA DE AWACATES.

Todo me parecía que corría rápidamente, obligandome a ni siquiera pensar en que aquello me afectaba. Las palabras acuchillaban mis oídos y se retorcian en mis ojos, provocando tormentas que salian vomitadas de mi cuerpo. Silencios mortales que penetrados en mí iban pudriendome como persona, humillandome a la perdición. Aquella noche rebeló mi verdadero sufrir. Hablar por hablar. Deponer todo aquello que me estaba haciendo daño. No hay culpables, la culpable siempre soy yo. No hay una sola razón, hay cientas de razones. No hay, ni existe un por quién lo hice?, siempre...es por mí. No hay mucho menos un a quién quería joder?, siempre y sin duda alguna es... sólo a mí. Si ya estaba podrida por dentro, porqué no estarlo fisicamente?. Impidieron mi marcha, iba lentamente a la mitad de la carrera, soñaba que me sentía plena. Podría llamarle egoísmo por quererme aún en su camino, evitando que el mío se desmoronara siguiendo su curso. Pero los comprendo, no hay más placer que complacerse a uno mismo con la compañia del otro ser. Podría afirmar que los comprendo en un 100%, pero para sincerarme, no me queda otra opción, me pongo en su lugar y siento lo mismo que ellos, los entiendo completamente.
Mi cuerpo descansó y se sintió pleno, mi ser se sentía libre, sin temores, sin cargas y sin remordimiento alguno de haberlo hecho. Anhelaría decir que me arrepiento de mi acción, pero solo me arrepiento de haberles causado tanto malestar emocional. Emociones: A falta de valentía me refugié en aquellas (emociones) que me mataban sin saber que para entonces no quedaba más de mí. Sonrisas: Me daba lástima ver como se inundaban en aquella arena movediza que habitaba cordialmente en lo que conocen como Anahí. Corrí, huyendo de mí, huía de lo que me pertenece, quería salir de mí e irme a habitar una vida diferente, no mejor, pero sí diferente. Quizá en el fondo lo quería tanto para saber apreciar la mía. Afronté la realidad, me quité esas partes que ya putrefactas viviendo en mí, me pudrían lo poco que aún seguía latiendo. Afronté. Afronté y estoy aquí escribiendo una parte de lo que fué mi casi despedida. No voy a decir que doy gracias por estar aquí. Porqué sería hipócrita de mi parte. Sólo diré que.... aún me falta aprender a dar gracias por seguir aquí. Cuando llegue ese día estaré en mi lecho de muerte y no daré gracias porseguir viva, daré las gracias por haber estado viva...






Era tarde y me culpaba.................


Anhelaba..........







.................................seguir aquí no era mi solución, solo se puso una única solución aquél sol... y .................

Quiero, anhelo, deseo...

Inicio con lo elemental pero no menos importante para la satisfacción plena hacia mi persona. Cierro círculos que me atomentaban en todo momento. Depuse con tanta fuerza aquello que me guiaba a enfatizar todo lo tediosamente absurdo que me abrigaba cada noche y cada sol. Comprendiendo los caminos que guían a mis seres queridos y no tan queridos es como pude aventar con toda la fuerza que me es posible aplicar sobre aquél peso que afligian mis ideologías. Acción--->> Reacción. Me ayudó a comprender que todo en esta vida se paga y si son o no culpables, me quedo tranquila sabiendolo. Sea para bien o sea para mal, pero todos trendrán su merecido.

Déjame volar, déjame irme, no me tengas como mayate amarrado a un hilo al que dejas volar pero siempre dirigiendo su vuelo. Corta el hilo, que ha llehado la hora de la marcha, y si me voy y te duele que me vaya físicamente de tí, es porque te sientes culpable, te sientes sola, pero dime, Yo qué puedo hacer al respecto?, creo yo ya hice mucho por bastante tiempo. Mi tiempo y el tuyo se agotan segundo a segundo, no encuentro otra solución mejor que la retirada física entre ambas. Quisiera poder ayudarte, pero primero debo ayudame, debo estar bien conmigo misma para estar bien con los demás, pero sobre todo contigo. Deseo tantas cosas pero en eso estoy, trabajando para hacer que se cumpla por fin lo que he anhelado por tanto tiempo.

Lo recuerdo así...


Aquél día dudé si tu aspecto cuadraba con lo que yo estaba acostumbrada, si tus gustos eran lo que yo necesitaba para salir de aquél mundo que me iba envolviendo suavemente escondiendo las espinas que me matarian una vez estando atrapada. Poco a poco y tan a tu ritmo me fuiste metiendo en tus preferencias tanto musicales como generales, haciendome vivir diferente a lo que acostumbradamente me estaba matando, sin darme cuenta del suicidio que estaba cometiendo dentro de aquél ambiente. Comenzaré con lo más simple, aquello que formó parte de mi infancia y me hiciste recordar, pero sobre todo anhelar regresar a aquella infancia tan singular. Seguiste metiendome sin querer en aquel universo en el que pernoctas, obligandome a hacerlo también. Me dejé llevar como hoja en una tarde fría, me atascabas la cabeza de sencillez, me alimentabas con cucharadas de humildad, pero era tanta que me hacia vomitar todo aquél ambiente que me obligaba a acercarme cada vez mas al barranco dando pequeños empujones para provocar mi perdición en un mundo cegado de situaciones y formas de ser nada favorables. Ignoraba que mi persona te pedía a gritos, y como por arte del destino apareciste. Construíste lo que soy, pieza por pieza, sol con sol formabas una persona diferente, creabas lo que ahora vez...